
Proyecciones para 2024 en Chile: Crecimiento moderado en medio de la incertidumbre
La economía chilena se ha enfrentado a un periodo de desaceleración en los últimos años. La insurrección de 2019 y la crisis económica posterior a la pandemia han frenado el crecimiento económico en Chile, lo que se ve reflejado en el crecimiento nulo del 0% en 2023, según las recientes estimaciones del Ministerio de Hacienda.
Si bien en 2022 las cifras económicas habían sido esperanzadoras, éstas estaban marcadas por el ajuste vivido post pandemia y la rápida reactivación económica luego de la reapertura de las ciudades. Pero este 2023 mostró el escenario real que atraviesa el país, revelando una coyuntura económica caracterizada por diversos desafíos en los últimos meses.
Este estancamiento económico durante 2023 se puede atribuir a una combinación de factores, destacando la crisis económica mundial, que ha impactado la demanda de productos chilenos; la desaceleración de la economía china, un crucial destino de las exportaciones; las políticas erráticas del Ministerio de Hacienda y la incertidumbre política, que han afectado la confianza empresarial.
De todas formas, al dar vuelta la página y revisar el escenario de cara a 2024, las proyecciones del Banco Central de Chile señalan un optimismo moderado para el próximo año, anticipando un crecimiento del 1,7%, números que se acercan a la expectativa de la que ya se hablaba hacer un par de meses por parte de las autoridades.
¿Por qué podría crecer la economía chilena en 2024?
La recuperación económica en el próximo año dependerá de varios factores clave. El primero de ellos va de la mano con la disminución de la inflación, situación que ha pegado muy fuerte en el país. Después de alcanzar un máximo histórico a inicios de 2023, se espera que la inflación se sitúe alrededor del 4% en 2024.
Esta reducción de la inflación generará un aumento en el salario real de las personas, ya que el costo del día a día tenderá a regularse e, incluso, a bajar en el primer semestre del año, permitiendo que los hogares puedan disponer de más recursos.
Así, se espera que el consumo local crezca durante la temporada, impulsando el comercio dentro del país e impulsando otras áreas como la recreación o el turismo.
A esto se suma la proyección de aumento de la Inversión, ya sea local o extranjera, en Chile. De hecho, las autoridades anticipan un incremento del 2,5% en la inversión para 2024, impulsado principalmente por proyectos de infraestructura, minería y la industria manufacturera.
Además, el término del proceso constitucional en el país, cualquiera sea la opción que gane en las futuras elecciones, plantea un escenario más estable de cara al mundo empresarial, al terminar con la incertidumbre inmediata. Con esto, crece la confianza empresarial dentro del país, lo que también impulsa las perspectivas económicas más positivas de cara al próximo año.
¿Qué sectores serán claves para la economía en 2024?
En 2024, se proyecta que el comercio interno desempeñe un papel crucial en la reactivación económica, respaldado por la recuperación del consumo y alimentado por la disminución de la inflación y el aumento de la inversión.
Esto iría de la mano con un crecimiento importante en el Turismo dado el potencial de crecimiento significativo en el sector, ligado al aumento de la actividad interna, lo que generaría un mayor número de visitantes dentro del país de cara a las temporadas estivales.
Así mismo, gran parte de la confianza nacional va de la mano con las expectativas de crecimiento en el ámbito de la minería. La producción de cobre, el principal producto de exportación de Chile, se proyecta al alza en 2024, consolidando una posición destacada que debería ayudar a estabilizar el precio del dólar en el país.
Finalmente, sectores como la industria manufacturera, la agricultura y la construcción plantean un crecimiento marginal de cara a 2024, situación que arrastraría algunos números negativos de este 2023 por la falta de inversión y la relación directa entre temporadas.
¿Qué riesgos atravesará la economía el próximo año?
A pesar de las perspectivas positivas, existen diferentes riesgos que podrían poner en peligro el crecimiento económico en 2024. Por ejemplo, la mantención de los conflictos bélicos en el extranjero puede afectar de manera directa la importación y exportación de productos, generando problemas en la producción nacional y en los precios de productos que vienen desde Europa o territorio árabe.
Así mismo, el continente se encuentra en un momento de incertidumbre política, con el reciente cambio de mando en Argentina y las futuras elecciones presidenciales en otros países de Sudamérica, lo que puede generar repercusiones directas en el comercio y la inversión con Chile.
Finalmente, no se puede dejar de lado la propia incertidumbre política en el país. Si bien el nuevo plebiscito debería acabar con las dudas sobre cómo viviremos los próximos años y el mismo Gobierno ha puesto un freno a la continuación del proceso en cualquier escenario, aún hay cuestionamientos que sólo se podrán dilucidar en los primeros meses de 2024.
En resumen, mientras se vislumbra un crecimiento modesto para la economía chilena en 2024, es crucial reconocer y abordar los riesgos potenciales que podrían influir en esta proyección. El monitoreo constante de los indicadores económicos y la adaptabilidad a condiciones cambiantes serán esenciales para garantizar una recuperación sostenible.