Después de meses de debate legislativo en los últimos años, la reforma previsional ya es ley. Y con su publicación en el Diario Oficial en marzo pasado, se dio paso a la implementación de una serie de medidas que impactarán directamente en los actuales y futuros pensionados del país.

Por esta razón, este año la agenda previsional contemplará varios hitos que buscan mejorar las condiciones de retiro, reducir brechas y ampliar la cobertura de beneficios como la Pensión Garantizada Universal (PGU).

Mayo: comienza a operar el Seguro de Lagunas Previsionales

Uno de los primeros cambios en entrar en vigencia es el llamado Seguro de Lagunas Previsionales, una herramienta que apunta a mejorar las futuras pensiones de quienes, por diversas razones, han tenido períodos sin cotizaciones.

Este seguro comenzará a aplicarse en mayo de 2025 y beneficiará especialmente a personas que han tenido interrupciones laborales, como trabajadoras que se alejaron del mercado laboral por maternidad o personas que han enfrentado desempleo por periodos prolongados.

El funcionamiento de este seguro contempla que el Estado realice aportes compensatorios en las cuentas previsionales de quienes cumplan con los requisitos, disminuyendo así el impacto de esos períodos sin cotización en la futura pensión de las personas, en una medida que apunta directamente a reducir las desigualdades que suelen afectar a los trabajadores más vulnerables del sistema.

Septiembre: aumento de la PGU al primer grupo de beneficiarios

Otro cambio relevante es el aumento en el monto de la Pensión Garantizada Universal (PGU) a $250.000, que comenzará a regir en septiembre de 2025 para un primer grupo de beneficiarios.

Este incremento será gradual, y en una primera etapa beneficiará principalmente a los adultos mayores de más de 82 años, mientras que en 2026 este monto llegará a los mayores de 75 años y, en 2027, a los mayores de 65 años, priorizando a quienes actualmente reciben los tramos más bajos de pensión y cumplen con los requisitos establecidos por el Registro Social de Hogares.

Este avance en la PGU responde al objetivo central de la reforma, garantizando una pensión base digna para todos los chilenos, independiente de cuánto hayan cotizado durante su vida laboral.

Octubre: inicio de la cotización adicional de 8,5%

Uno de los puntos más discutidos de la reforma fue el aumento de la cotización obligatoria y cómo este iría dirigido al fondo personal de cada trabajador, o ser destinado a un fondo integral.

A partir de octubre de 2025, comenzará a aplicarse gradualmente una cotización adicional a la renta imponible del 7% con cargo al empleador, monto que se implementará de forma gradual por los próximos 9 años para garantizar la adaptación del sistema.

En este escenario, el 4% de la cotización extra irá a un seguro social, destinado a financiar el Seguro de Invalidez y Sobrevivencia que tiene cada trabajador, además de aportes dedicados a la compensación por diferencia de expectativa de vida para las mujeres.

En tanto, el 4,5% restante estará enfocado en fortalecer la cuenta individual de cada trabajador, fomentando el ahorro y ampliando el monto de pensión futuro.

Un año de cambios relevantes para las personas

La reforma previsional de 2025 marca una modificación importante en el sistema de pensiones en Chile. A diferencia de otros procesos legislativos, esta vez los cambios ya están en marcha y afectan directamente el bolsillo y futuro de millones de personas.

Para los trabajadores, esto significa que el ahorro previsional cobrará aún más relevancia, mientras que para los jubilados se abren nuevas posibilidades de recibir apoyos estatales más robustos y sostenidos en el tiempo.

Aunque este año está centrado en la implementación, aún queda espacio para evaluar ajustes en base a los resultados que vayan observándose. Por eso, tanto el Gobierno como las autoridades previsionales han reiterado que el diálogo seguirá abierto para garantizar que el nuevo sistema funcione bien y logre sus objetivos.